El inicio de una nueva etapa formativa representa mucho más que simplemente acceder a contenidos académicos o cumplir con actividades evaluativas; implica un profundo proceso de transformación personal y profesional. En este camino hacia la excelencia, es necesario asumir un papel activo y consciente en la construcción de nuestro futuro. No basta con inscribirse en una institución educativa o asistir a clases virtuales: se requiere compromiso, disciplina, motivación y un enfoque claro hacia las metas planteadas. Como estudiante de la Fundación Universitaria San Mateo, comprendo que el éxito en mi proceso de formación depende en gran medida de mi actitud, mi constancia y mi capacidad para adaptarme a los desafíos. Este compromiso no solo involucra lo académico, sino también el desarrollo de valores fundamentales como la responsabilidad, el respeto, la honestidad y la empatía. Es un compromiso conmigo mismo, con mi familia, con la sociedad y con la institución que me brinda la oport...